La educación penitenciaria hace un cambio

Al pensar en la prisión, muchos podrían pensar que no hay esperanza de hacer nada más. En realidad, las prisiones fueron establecidos no sólo para la retribución, sino también con el propósito de la rehabilitación.

No sólo algunas prisiones tienen condiciones horribles dentro de su establecimiento, sino que también están encarcelando a personas durante varios años por condenas menores.

Según la Iniciativa de Política Penitenciaria, Estados Unidos encarcela a más personas per cápita que cualquier otro país. Esto también se conoce como el encarcelamiento masivo.

A medida que han pasado los años, las prisiones están empezando a proporcionar más cursos de educación para sus reclusos. No sólo esto, sino que se han iniciado más programas para facilitar su transición de nuevo al mundo real.

En mayo de 2019, la Universidad de Washington en Missouri tuvo su primera clase de graduados encarcelados. La clase consistió en 10 reclusos que todos lograron sus créditos y asistieron a clases dentro del centro correccional en el que estaban.

Estos títulos no sólo les ayudan a conseguir trabajo después de la prisión, lo cual es muy difícil de hacer teniendo en cuenta su historia, pero que también les enseña habilidades críticas que les ayudan a largo plazo. Algunas de las principales habilidades involucran el pensamiento crítico.

Uno de los varios programas que ayudan a las personas encarceladas a recuperarse se llama Voces para una Segunda Oportunidad. Este programa promueve la recuperación y rehabilitación para hacer la transición de vuelta a la comunidad más fácil.

Otro programa más local es el Programa de Becarios de Prisiones de Georgetown en la cárcel de DC que fue fundada a principios del año 2018 para asegurarse de que tienen la oportunidad de obtener una educación superior si se desea.

Cada vez más de estos programas están en el presente y se ven muy eficientes. Según SBS, la población carcelaria de los Estados Unidos ha estado aumentando drásticamente desde la década de los 1980. Dado que más personas están siendo encarcelados, ellas también deberían ser capaces de llegar a estos programas para ayudar con su rehabilitación y en el futuro, salir con títulos y oportunidades de trabajo